Por: Edith Soto.-
Bendiciones Querido Lector;
Quiero empezar haciéndote una pregunta:
¿Será qué un hijo de Dios puede mentir?
Muchos me han contestado de que si se puede. Se puede, mas NO se DEBE.
La palabra de Dios es muy clara con respecto a la mentira. Jesús mismo dice que el que miente es hijo del diablo.
En el evangelio de Juan 8:44, Jesús les dijo: «Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y los deseos de vuestro padre queréis hacer. Él ha sido homicida desde el principio, y no ha permanecido en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuan-do habla mentira, de suyo habla; porque es mentiroso, y padre de mentira».
¡Wow! Qué fuerte.
Esto me lleva a pensar que si nosotros decimos ser hijos de Dios y tenemos deseos de mentir y engañar a nuestro prójimo, excusándonos con frases como: -«fue una mentira piadosa», eso nos convierte en mentirosos y, por ende, nos desafía a preguntarnos sobre nuestra condición espiritual.
Dicho en lenguaje más sencillo querido hermano, una mentira es una mentira —chica o grande o piadosa— y ante los ojos de Dios estamos mal, tan mal que NO nos ve como a sus hijos.
El apóstol Pablo nos aconseja diciéndonos: «NO mintais los unos a los otros…», «habiéndoos despojado del viejo hombre [con sus hechos]». Si ya te despojaste verdaderamente del viejo hombre, vivamos una vida recta delante de Dios.
Hoy en día es triste ver que muchos hermanos en Cristo mienten, tan fácilmente, que ya lo ven normal. Se olvidan que a Dios no lo podemos engañar, ni a nosotros mismos. Recuerda que entre el cielo y la tierra no queda nada oculto, todo sale a la luz.
A la verdad todos hemos mentido —de diferentes formas—, y el que dice que jamas ha mentido, ya mintió, porque todos hemos fallado en esa área en algún momento de nuestra vida. La buena noticia es que Jesús desea que verdaderamente nos despojemos de ese viejo hombre y nos renovemos día a día en Él.
Muchos piensan que no pasará nada y lo mas triste es que se creen sus propias mentiras; pero hay un terrible final para ellos. Dice Apocalipsis 21:8 «todos los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda».
Ahora te pregunto: ¿tú crees que DIOS juega con respecto a los que hablan mentira? No seas uno de los que miente por salir de un apuro o librarte de un problema. Recuerda que la verdad, por mas dura que sea, siempre es lo mejor a decir; y lo más importante, tiene el respaldo de Dios.∞
-Publicado en agosto 2015-